Algunos expertos coinciden en lo importante que es observar y conocer a los competidores antes de realizarse el torneo pero hay algo tanto o más importante que eso: entender cómo te ven ellos a ti y cuál será su reacción cuando se encuentren frente a frente en la competencia.
Maththew Rochman ha contado la manera cómo observó a un jugador en particular, descubriendo detalles que tenía de acuerdo con la situación. Por ejemplo este jugador apostaba si todos los demás habían pasado; Si alguien apostaba contra él, igualaba la apuesta cualquiera que fuese su juego; si no ligaba nada en el flop no apostaría ni igualaría nada y si alguien intentaba farolearle igualaba y apostaría de nuevo en el turn sin importar una caída.
Habiendo observado todo esto, el enfrentamiento resultó beneficioso a Rochman pues tenía claro cuando le aceptaría la apuesta o tal vez la subiría. Se dio cuenta también que lo consideró un jugador muy seguro así que le resultó sencillo farolear y ganarle varias manos con relativa facilidad.
Esta es solo una prueba de lo importante que resulta no solo conocer a nuestro oponente sino también saber cómo nos ven ellos a nosotros. Lo mejor será siempre estudiar al competidor, eso nos dará una ventaja. Y nuestra habilidad para descifrar rivales mejorará con la experiencia en el juego.